Hola a todos, desde que surgió la idea de crear este Blog hasta este primer comentario han pasado varios meses. El motivo ha sido fundamentalmente la falta de tiempo, pues trabajar y estudiar a la vez es bastante sacrificado, como muchos de vosotros sabreis.
Ahora sí tengo tiempo y me hace mucha ilusión.
En primer lugar me gustaría hablaros del motivo que me mueve a hacer esto. Vereis, yo durante muchos años he viajado por todo el mundo por mi cuenta, en plan mochilero, buscando los alojamientos más modestos, por no decir cutres, y siempre dando rienda suelta a la improvisación. No me gustan los viajes organizados ni prefabricados. Yo lo único que sé cuando viajo son las fechas de ida y vuelta.
El caso es que un buen año caí en Venezuela. El país en sí mismo es una pasada, pero el delta del río Orinoco, al nordeste del país... Qué deciros... Yo soy bióloga y nada creyente, pero he pensado muchas veces que si toda esa historia de Adán y Eva fuera cierta, el Edén habría estado allí. Claro, Adán y Eva entonces habrían sido waraos (indios de esta parte del país) y llevarían taparrabos de hoja de mangle y no de parra...
Y me gustó tanto e hice tan buenos amigos que desde entonces siempre que puedo voy. Me alojo en un palafito hecho de madera de mangle y palma de temiche al borde del río, en la comunidad indígena de Winamorena, y me dedico a recorrer, siempre por río puesto que no hay carreteras, todo este laberinto verde intenso de islas, canales y manglares, y a la contemplación de su asombrosa vida salvaje, que ya os iré mostrando.
¿Qué me apetece subidón de adrenalina? Entonces toca pesca de rayas o pirañas, caimanes por la noche o incursión en los manglares con los indios para coger cangrejos tan grandes como centollos... No hay lugar para el aburrimiento.
Con este espacio quiero animaros a que vayais a conocerlo. A que vayais a conocer estos parajes vírgenes y a sus habitantes, los warao o "habitantes del río", cómo son, cómo viven e incluso cómo hablan, que no es en cristiano... Y por otra parte serviros de guía porque además de haber poca información para el turista, está con frecuencia equivocada, incompleta o manipulada por los intereses de las editoriales.
Por último, hay mucha gente que me pregunta si aquello es seguro, no solamente por la fama que tiene Venezuela en cuanto a delincuencia sino por el hecho de ir a un sitio donde hay tanto "bicharraco suelto". Bueno, es cierto que el país tiene una tasa de delitos más alta de lo que nosotros estamos acostumbrados, pero unas sencillas medidas de prudencia y sentido común son suficientes para escapar de ello. En cuanto a los "bichos", a esas serpientes gigantescas que te estrangulan mientras duermes, a esas pirañas que te devoran en cuanto metes una uña en el agua, o a esos caimanes que ni los ves venir y ya estás en el fondo del río... ¡¡¡¡¡Cuánto daño ha hecho el cine!!!!
Como esta introducción ya está siendo demasiado larga y mi intención es que sigais leyendo, mejor lo dejamos aquí. Ya iré detallando por secciones todas mis experiencias a lo largo de estos años.
Espero que os hayais quedado con ganas de ver más. Aquí van unas fotos y algún video.
Hasta la próxima.
